Sinopsis:
Una joven en busca de sí misma abandona su comunidad judía ultraortodoxa de Nueva York y comienza una nueva vida en Berlín. Pero, justo cuando encuentra la libertad, el pasado llama a su puerta.
Mi amiga Mabi fue la primera en recomendarme esta miniserie y pronto la vi mencionada en muchos medios. Es evidente que da que hablar por motivos que iré desgranando.
En primer lugar, es diferente. La historia de una joven hebrea ortodoxa que abandona su opresiva comunidad carece de referencias a nada que conozcamos. En segundo, llama la atención que en un mundo globalizado del siglo XXI, y más en Nueva York, aún existan núcleos religiosos que remiten a muchos centurias atrás y no son musulmanes. Si chocan sus costumbres más que medievales, clama al cielo el papel de la mujer, poco más que una fábrica de engendrar bebés. Por poner un ejemplo, ni siquiera puede cantar en público porque es una obscenidad. Un horror.
La religión ha de basarse en la libertad del feligrés y nunca oprimir, al menos así es como lo veo. No soporto los fundamentalismos, vengan de donde vengan, porque en nombre de Dios se cometen barbaridades.
Otro aspecto positivo de la serie es que solo tiene cuatro episodios. La narración no es lineal sino que a través de flashbacks vamos conociendo los motivos que llevan a la joven Esty a huir a Berlín, justo una ciudad marcada por los crímenes contra miles de judíos durante el Tercer Reich.
La vida de liberación en esta ciudad puede parecer un poco edulcorada, aunque supongo que se debe a que la diferencia con la vida anterior parezca mayor. No hacía falta, que ya nos damos cuenta.
1 comentario:
Es una serie interesante y es la lucha de una mujer por su libertad, aprender formas de vida culturas, siempre, me ha interesado y está basado en un hecho real. Me alegra que la hayas visto y te haya sido interesante.
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