martes, 4 de febrero de 2014
Más furia
Las fotos no son mías, sino que aparecen en la página web de "El diario montañés". Servidora, haciendo gala de su habitual previsión, se dejó la cámara durmiendo el sueño de los justos en el cajón de la mesa de trabajo. Mis reniegos cuando el sábado por la tarde vi un arco iris muy cerca de mí, con una intensidad de colores absolutamente maravillosa, se debieron escuchar al otro lado de la costa.
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2 comentarios:
Me da mucho miedo del aire, pero más me daría del agua. La belleza del mar embravecido la compruebo gracias a fotografías ajenas.
Qué gran oxímoron es el mar: belleza y crueldad al mismo tiempo.
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