Cazafantasmas: Más allá

Sinopsis:

Una madre soltera y sus dos hijos llegan a una pequeña ciudad, descubriendo su conexión con los cazafantasmas originales y el legado secreto que dejó su abuelo tras de sí.

Me tocó en un sorteo de internet una entrada de cine que tenía que ser canjeada en taquilla de lunes a jueves. O sea que si no la gastaba en la última semana de vacaciones la perdería. Como lo que más me interesaba de la cartelera ya lo había visto, opté por el ejercicio de nostalgia que supone Cazafantasmas: más allá. 

Parto de la base de que no soy fan acérrima de la saga ochentera, aunque las he visto, por supuesto, e incluso disfruté de la versión femenina de hace pocos años. Esta última se ve orientada a un público más joven, de las edades de los protagonistas, entre niños y adolescentes. Los que estaban en la sala conocían las películas anteriores porque reaccionaban ante los guiños y referencias. O a lo mejor eran los padres. Cuando aparecen los Cazafantasmas originales (excepto, claro está, el fallecido Harold Ramis, al que se homenajea) se oyeron tímidos aplausos también. 

La cuestión es que no me aburrió sino que vi una continuación que destila respeto, nostalgia y cariño, y que creo que no será la última.