martes, 15 de diciembre de 2009

El Marqués


Sinopsis:
Una novela que narra los antecedentes biográficos del marqués de Castro, uno de los personajes más populares de la serie de TVE, «La Señora».
Ramiro Villaseca es un chico de procedencia humilde. su madre trabaja en una vaquería y el padre desapareció antes de que él naciera. Un amigo de la madre se ha encargado de la educación del niño y uno de los valores que con mayor interés le ha inculcado es la ambición. Ramiro sigue los preceptos de Isidro y a la primera oportunidad que tiene, se casa con Julia, la hija de un posadero. El matrimonio no resulta como él había pensado, y un día en el que se encuentra solo en la taberna, un viajero que solía frecuentarles, muere después de caer por una escalera. En la caída, el hombre provoca un incendio y Ramiro aprovecha la oportunidad para usurpar su identidad y escapar del pueblo convertido en Gonzalo López. Su objetivo es alcanzar la ciudad en la que vive Irene de Castro. El verdadero Gonzalo le había contado sus viajes y en ellos siempre hablaba de los marqueses de Castro, de sus riquezas y de la belleza de su hija. Pero cuando después de muchos sinsabores, el nuevo Gonzalo por fin logre instalarse en la vida de Irene, Julia, que nunca creyó que el cuerpo calcinado que encontraron en la taberna fuera el de su marido, aparecerá para recordarle cuál es su verdadera identidad y para acabar con el prestigio social que él se había inventado. Una excelente novela de amor y traición cuyos personajes se mueven sobre el papel de la España de los años veinte. Ángel Bahamonde, historiador y asesor de «La señora» finaliza el libro con un apéndice documental sobre la España de aquellos años.
Una novela tiene un formato narrativo potente: personajes con un fuerte conflicto interno, grandes pasiones, memoria de una época, trasfondo histórico.


Me esperaba más de esta novela, generoso regalo de nuestra amiga Carolina. Cierto que tiene una parte interesante, aquella en que narra los orígenes humildes del personaje y los avatares que lo llevan a asumir la identidad de Gonzalo, futuro Marqués de Castro. Sin embargo, no explica de manera convincente su evolución de ser un hombre apenas sin maldad a dominar los resortes de la manipulación. La autora, que es la guionista de la serie, tampoco se exprime la sesera pues muchos párrafos son calcados de los episodios de la primera temporada.

Por otro lado, como el libro salió hace meses y quizás entonces no tenía pergeñado el final del personaje, la novela concluye de manera tan abrupta que el lector no puede por menos que sentirse defraudado. En conclusión, creo que Virginia Yagüe, con las prisas de llegar al mercado se apresuró a juntar escenas que tenía escritas con las ideas del pasado del personaje, muy interesantes a priori pero poco elaboradas. Una pena pues Gonzalo de Castro es uno de los mejores personajes de la televisión, en gran parte por estar encarnado por ese grandísimo actor que es Roberto Enríquez que le aporta todos esos matices poliédricos que supera, creo, el guión. Y que conste que lo proclamo sin cegarme la pasión que me causa este señor.

2 comentarios:

ana dijo...

¡Qué desilusión! pensaba que me ibas a contar algo de la historia, o su desenlace

Unknown dijo...

Vaya recuerdo más bonito!! Que maravilla de personaje. Grandísimo trabajo de nuestro querido Roberto.