Siempre me han gustado las novelas de Lucía Etxebarria y, en especial, la que acabo de leer, Cosmofobia. En esta última obra suya ha superado el telón de fondo de “sexo, drogas y rock and roll” para abarcar el amplísimo espectro de las relaciones humanas, desde inmigrantes hasta el pijerío matritense, en una miríada de historias cuyos destinos acaban por entrelazarse. Muy recomendable, en mi opinión.
Os copio el típico párrafo promocional de la editorial:
De la mano de varios personajes que se entrecruzan a lo largo de toda la obra, con una prosa más depurada que nunca, Lucía Etxebarria traza amores y destinos inmersos en la más cercana actualidad en una novela ágil y directa llamada a convertirse por méritos propios en el grito colectivo de toda una generación, en el certero retrato de una nueva sociedad más plural, más diversa. En la novela definitiva sobre una nueva época. La nuestra.Una Lucía Etxebarria más lúcida y madura, con un extraordinario oído para captar el lenguaje de la calle y su ya emblemática sensibilidad para las cotidianas historias de amor, nos sumerge en la vida de uno de los barrios más representativos de Madrid, Lavapiés, y dibuja un fresco vívido, real, intenso, de sus virtudes, problemas e inquietudes marcadas por la inmigración, la pluralidad étnica y la lucha diaria, entre la modernidad y la miseria, por salir adelante.
Dos citas extraídas de la novela:
“Precisamente, si conseguimos avanzar en la vida es gracias al olvido, porque si recordáramos todas las cosas buenas que hemos perdido nos aplastaría la nostalgia y, si recordáramos todas las malas, nos comería la depresión.”
“En la vida hay siempre molinos de viento contra los que uno no puede luchar, porque esos molinos no se mueven nunca de su sitio y siempre están moviendo las aspas en la misma dirección y, cuando uno arremete contra ellos, siempre sale mal parado; así que, lo mejor es dejarlos donde están, inamovibles, y olvidarse de ellos y continuar camino, que ellos sigan a merced del viento, agitando las aspas, como quien proclama a gritos una verdad, mientras que uno si quiere aprender cosas, debe avanzar contra el viento, adelante, siempre adelante..."
Os copio el típico párrafo promocional de la editorial:
De la mano de varios personajes que se entrecruzan a lo largo de toda la obra, con una prosa más depurada que nunca, Lucía Etxebarria traza amores y destinos inmersos en la más cercana actualidad en una novela ágil y directa llamada a convertirse por méritos propios en el grito colectivo de toda una generación, en el certero retrato de una nueva sociedad más plural, más diversa. En la novela definitiva sobre una nueva época. La nuestra.Una Lucía Etxebarria más lúcida y madura, con un extraordinario oído para captar el lenguaje de la calle y su ya emblemática sensibilidad para las cotidianas historias de amor, nos sumerge en la vida de uno de los barrios más representativos de Madrid, Lavapiés, y dibuja un fresco vívido, real, intenso, de sus virtudes, problemas e inquietudes marcadas por la inmigración, la pluralidad étnica y la lucha diaria, entre la modernidad y la miseria, por salir adelante.
Dos citas extraídas de la novela:
“Precisamente, si conseguimos avanzar en la vida es gracias al olvido, porque si recordáramos todas las cosas buenas que hemos perdido nos aplastaría la nostalgia y, si recordáramos todas las malas, nos comería la depresión.”
“En la vida hay siempre molinos de viento contra los que uno no puede luchar, porque esos molinos no se mueven nunca de su sitio y siempre están moviendo las aspas en la misma dirección y, cuando uno arremete contra ellos, siempre sale mal parado; así que, lo mejor es dejarlos donde están, inamovibles, y olvidarse de ellos y continuar camino, que ellos sigan a merced del viento, agitando las aspas, como quien proclama a gritos una verdad, mientras que uno si quiere aprender cosas, debe avanzar contra el viento, adelante, siempre adelante..."
3 comentarios:
Molt bones les cites. Ja em deixaràs la novel.la si pot ser.
B7s
Clar que sí, faltaria plus. Quan vullgues.
Si vols te'l porte a Sant Ramon.
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