Sucesor designado

Sinopsis:
Tom Kirkman es un miembro de rango medio del gabinete de la Casa Blanca que debe asumir el cargo de Presidente cuando un devastador ataque terrorista en Washington, durante el discurso del Estado de la Nación, acaba con la vida del anterior presidente y de sus principales sustitutos.

El nombre de la serie proviene del "superviviente designado", que hace referencia al miembro del gobierno que no asiste al Discurso sobre el Estado de la Nación en caso de que un ataque acabe con la vida del Presidente y de la cúpula central del gobierno. No tenía la menor idea de que esa figura existiera y me pregunto qué medidas tendrá la legislación española al respecto.

El caso es que, después de un atentado en el que todos los susodichos mueren, Tom Kirkman (Kiefer Sutherkand), un miembro de menor importancia dentro del ejecutivo estadounidense, será quien tenga que hacerse cargo de la Casa Blanca y de encontrar a los responsables del ataque a los integrantes más importantes del gobierno. Así pues, nos centramos en la figura, que siempre da mucho juego, de un hombre ordinario envuelto en una situación extraordinaria. Y anda que no hay serpientes y alacranes en el despacho oval y aledaños.

Es inevitable ponernos de lado del protagonista, un hombre honrado, al que tan bien encarna Kiefer Sutherland, moviéndose entre pirañas, con el miedo de que una puñalada trapera le alcance en cualquier momento. Me da que los chanchullos políticos serán un pálido reflejo de la realidad. Será ficción, pero cuántos desearían que ese personaje ocupara el sillón presidencial y no cierto impresentable.

Le acompaña el guapo mexicano Adan Canto en el que me fijé en la serie The Following.