Tras varios años dando rienda suelta al artista compulsivo y polifacético que lleva dentro, tras haberse convertido en un icono de la modernidad indie francesa, la racha se le rompe a Mathias Malzieu. Le diagnostican una enfermedad sanguínea que lo pone a las puertas de la muerte. Pero no claudica ante la amenaza, se agarra a la vida y a quienes dulcemente le rodean tan fuerte como un niño lo hace a sus sueños. Además, Mathias cuenta con una baza secreta, un don tremendamente maravilloso: la capacidad de sublimar su experiencia a través de la escritura, gracias a una tremenda visión poética de la vida.
Tomé prestado este libro de la biblioteca porque, además de no ser muy extenso, del autor, Mathias Malzieu, había leído La mecánica del corazón y me pareció una delicia de cuento gótico cuya adaptación cinematográfica de animación tengo intención de buscar por esas redes.
Pensé que se trataría de otra historia tan sensible y curiosa como la anterior, pero me equivoqué, aunque solo en parte: esta vez se trata de una historia real, la del propio Malzieu, al que detectan una enfermedad grave en la sangre. De ahí lo de vampiro, porque precisa de transfusiones continuamente, y lo del pijama, uniforme de hospital. Es admirable cómo puede transformar el dolor de análisis, horrorosas pruebas médicas, quimioterapia y demás, estancias hospitalarias y operaciones, en imágenes poéticas y, sobre todo, en un canto, un grito, un aullido a la vida. Para que luego yo me vaya quejando de un catarro. Vergüenza tendría que darme.
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