Sinopsis:
Siempre fue difícil ser Harry Potter y no es mucho más fácil ahora que es un empleado con exceso de trabajo del Ministerio de Magia, un marido y padre de tres niños en edad escolar.
Mientras Harry se enfrenta con un pasado que se niega a permanecer donde pertenece, su hijo menor Albus debe luchar con el peso de una herencia familiar que nunca quiso. Como el pasado y el presente se fusionan ominosamente, padre e hijo descubren una verdad incómoda: a veces, la oscuridad viene de lugares inesperados.
Este libro fue un regalo de Papá Noel y lo he disfrutado más de lo que me pensaba. Ya sabréis que no es una novela sino el libreto de la obra teatral que se representa en Londres y cuyas localidades están agotadas hasta 2018. No me extraña porque si me sobrara el dinero también iría a verla. Si la puesta en escena es la mitad de lo que sugiere la lectura tiene que ser de lo más espectacular. Aparte de eso, para los seguidores de la saga resulta una delicia reencontrarse con tantos y tantos personajes que aparecen en las novelas, gracias a la magia de los giratiempos, y no destripo más. Como punto negativo en la traducción, los animales que llevan mensajes son lechuzas, no búhos.
Como me temo que lo de Londres es poco viable, esperaré a que hagan la película, lo que sucederá tarde o temprano, no me cabe duda.
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