jueves, 28 de junio de 2012

No hay dos sin tres



Ojalá la canción de Bisbal sea profética y España gane la final el domingo. Que sí, que puede que el fútbol sea el opio de nuestra sociedad, que no por ser campeones bajará la prima de riesgo ni el número de parados ni se nos va a resolver la economía. Pero, qué narices, muchos millones de españoles olvidarán las penas por un rato al menos y nos sentiremos más unidos, que quizá nos hace falta.

Anoche, como el sábado pasado, pedimos prestada la tele pequeña a mi madre para ver el fútbol en la calle y disfrutar de un piscolabis con los vecinos. Me hace gracia que de nuevo el pueblo esté engalanado de banderas españolas, como si solo tuviéramos la nacionalidad cuando juega la selección de fútbol. En fin… Servidora, que se pone muy nerviosa ante la pantalla, más que nada porque no entiende de torta de las reglas del balompié, se cogió su notebook y se puso a disfrutar de las nuevas peripecias del profesor Gabriel y su cada vez más aventajada alumna. Prerrogativa de la escasez de luz en la calle es que si me ruborizaba no se me notaba y si se me agitaba la respiración era por los nervios futboleros.

En la tanda de penaltis, no sabía si mirar o no a la pantalla. Al final, mi lado masoquista prevaleció y grité como toda España los goles de los nuestros. Las fotos son del Twitter de los jugadores.



El conflicto se producirá el domingo: a la misma hora del fútbol tendrá lugar en Agost el desfile de Moros y Cristianos (que no Ronaldo, jiji). Recuerdo que hace cuatro años, la anterior final de la Eurocopa coincidió con la procesión a San Pedro. Lo que sucedió fue que muchos de los comparsistas, además de llevar la cara pintada con los colores de la bandera española, tenían pinganillos en la oreja para ir escuchando la radio, así que en plena procesión, la más corta, rápida y con menos asistencia de personal de toda la historia, se desmandaron gritando ¡Gooooooooooool!

Veremos qué pasa el domingo. Ojalá se repita la alegría.



2 comentarios:

Johnny dijo...

Felicitaciones a España y ya se enfrentará a Alemania o Italia. Ojalá gane, Aymé le va a España.

Mari Pau dijo...

A mi y a mi marido y a mi padre y mi madre nos la bufa si gaNa España o pierde, no nos gusta esta clase de futbol donde los jugadores ganan tanto dinero en esta época de crisis ni en ninguna época, por favor, es de locos, yo apoyo a la Roja si inmediatmente se bajan el sueldo de manera substanciosa, si no, a mi no me comen nadie el cerebro con patriotismos futboleros... Yo quiero que mi país tenga buenos políticos, que no haya tanta corrupción, me da vergüenza los extremos a los que hemos llegado.

Yo no caigo en trampa del futbol... España no será más admirada por ganar al futbol sino por hacer bien las cosas política y economicamente.

Fuera Barça, fuera Madrid, fuera la Roja... mientras ganen lo que ganan.

FUTBOL FUEEERAAAA...