Con motivo de las fiestas de Carnaval, el otro día nos reunimos en un piso de Puente San Miguel (Cantabria) un grupo de amigos. La idea era juntarnos para que cada cual diera una muestra de su talento y actuara para los demás. Al final acudieron: Amy Winehouse (anfitriona), el Capitán Garfio (churri de la anfitriona), Peter Pan (hijo del susodicho churri), la princesa Fiona (amiga de la anfitriona), John Travolta & Olivia Newton-John (ella, hermana de Fiona), una familia rural compuesta por una granjera, un toro y un bebé caracterizado de Gallina Turuleta (amigos de la anfitriona), Madonna (un chico amigo de la anfitriona y de la princesa Fiona), la Pitonisa Lola (mi hermana Mari), un poltergeist multiforme invocado por las malas artes de la Pitonisa y que también ejerció de chico-gogó & ligue de Madonna (mi hermano Jorge), una Terremoto de Alcorcón (amiga de mi hermana Mari) y otra Terremoto de Alcorcón (servidora).
La fiesta se desarrolló sin incidente digno de mención, en el sentido de que no acudió ningún vecino para echarnos un rapapolvo, pese a que terminamos hacia las tres y pico de la mañana con el jolgorio. Tampoco la policía local hizo acto de presencia, lo cual, teniendo en cuenta el cariz, digamos problemático, de las figuras allí reunidas no deja de tener su mérito. O su demérito, según como se mire. Eso sí, como anécdota digna de figurar entre la carnaza de la prensa rosa, reseñar que Madonna intentó acosar sexualmente al pobre chico chino que nos traía el pedido de guarreridas orientales y que su ligue del momento, un pintinjarras melenudo con muy malas pulgas (=Jorge), amenazó más de una vez a los asistentes que habían traído cámaras de fotos con rompérselas junto con los correspondientes tabiques nasales si no dejaban de agobiarle con tanta fotito.
La fiesta se desarrolló sin incidente digno de mención, en el sentido de que no acudió ningún vecino para echarnos un rapapolvo, pese a que terminamos hacia las tres y pico de la mañana con el jolgorio. Tampoco la policía local hizo acto de presencia, lo cual, teniendo en cuenta el cariz, digamos problemático, de las figuras allí reunidas no deja de tener su mérito. O su demérito, según como se mire. Eso sí, como anécdota digna de figurar entre la carnaza de la prensa rosa, reseñar que Madonna intentó acosar sexualmente al pobre chico chino que nos traía el pedido de guarreridas orientales y que su ligue del momento, un pintinjarras melenudo con muy malas pulgas (=Jorge), amenazó más de una vez a los asistentes que habían traído cámaras de fotos con rompérselas junto con los correspondientes tabiques nasales si no dejaban de agobiarle con tanta fotito.
2 comentarios:
¡Anda que no os lo pasasteis bien ni ná!
¿El del pelucón negro es tu hermano Jorge, por un casual?
Pues sí, el mismo que viste (pelucón) y calza.
Publicar un comentario