miércoles, 17 de mayo de 2017

Lucía, alfarera



Mi preciosa Lucía, guiada por su tío Tomás, mi hermano, disfruta por primera vez del placer de embarrarse las manos con la materia prima de la alfarería.


Esa explosión de risas al ver moldearse la pieza es el más maravilloso de los sonidos.


1 comentario:

carolina dijo...

Me parece un vídeo de lo más tierno que he visto en mucho tiempo. Es un testimonio encantador de cómo los saberes se van transmitiendo de generación en generación. Y estoy de acuerdo en que la risa de Lucía es lo mejor.