Pues me encuentro de puente fabricado por mi mismo desde el viernes hasta el miercoles que vuelvo a trabajar. Días que he cogido de los que me corresponden de este año debido a que mi cese puede ser inminente. La jornada sabatina se presentaba especial para mí porque desde hace algunas semanas tenía las entradas sacadas para dos espectáculos, el primero de ellos en el Teatro Infanta Leonor, "El vuelo del cisne, tributo a Billy Elliot" con una aclaración en el cartel de "no se trata del musical que triunfa en Madrid", ya que podía llevar a engaño a alguna gente. Lo representan una compañía de chicos jóvenes que han elegido Jaén para representar la primera de las funciones de una larga gira. Es un musical con los números musicales de la obra de teatro-película (bueno, algunos no) y partiendo de una historia particular de Billy Elliot a la inversa: una chica adolescente, huérfana de madre, que prefiere los guantes de boxeo y el ring a las zapatillas de ballet y el tutú. Su padre trata de convencerla que lo mejor para ella es el baile, el ballet, pero no por machismo como al principio pudiese parecer. Le cuenta la historia de Billy Elliot y a mediados de la obra le dice que él era un niño que prefería las zapatillas de ballet al boxeo y que su padre y su hermano (mineros) se oponían hasta que al final entraron en vereda. Y con esto he dicho demasiado.
Pasaban los números musicales y faltaba uno hasta que por fin llegó, el tema principal de "El lago de los cisnes" bailado por una bailarina tradicional con tutú, que me pone el vello de punta las primeras notas y el lacrimal también trabaja un poco. Antes de mi pasión por ésto de la danza ya me llamaba mucho la atención esa pieza. No sé, igual es de alguna vida anterior. Y a continuación a las 8 empezaba en otro teatro el "Festival Bellysurdance" que se celebra todos los años con nuestra autóctona Alika Danza acompañada de muchas estrellas de la geografía española que nos ofrecieron Danza del vientre y similares. Fueron dos horas y media sensacionales. Y cuando todo parecía que con eso terminaba la cosa, pues no, el domingo el turno de las más pequeñas de la Escuela de Danza Rocío nos ofrecían un espectáculo callejero con bailes flamencos, la danza del fuego, bailes tradicionales de Jaén entre otros. Aquí sí que he portado mi cámara.
Pues me encuentro de puente fabricado por mi mismo desde el viernes hasta el miercoles que vuelvo a trabajar. Días que he cogido de los que me corresponden de este año debido a que mi cese puede ser inminente. La jornada sabatina se presentaba especial para mí porque desde hace algunas semanas tenía las entradas sacadas para dos espectáculos, el primero de ellos en el Teatro Infanta Leonor, "El vuelo del cisne, tributo a Billy Elliot" con una aclaración en el cartel de "no se trata del musical que triunfa en Madrid", ya que podía llevar a engaño a alguna gente. Lo representan una compañía de chicos jóvenes que han elegido Jaén para representar la primera de las funciones de una larga gira. Es un musical con los números musicales de la obra de teatro-película (bueno, algunos no) y partiendo de una historia particular de Billy Elliot a la inversa: una chica adolescente, huérfana de madre, que prefiere los guantes de boxeo y el ring a las zapatillas de ballet y el tutú. Su padre trata de convencerla que lo mejor para ella es el baile, el ballet, pero no por machismo como al principio pudiese parecer. Le cuenta la historia de Billy Elliot y a mediados de la obra le dice que él era un niño que prefería las zapatillas de ballet al boxeo y que su padre y su hermano (mineros) se oponían hasta que al final entraron en vereda. Y con esto he dicho demasiado.
Pasaban los números musicales y faltaba uno hasta que por fin llegó, el tema principal de "El lago de los cisnes" bailado por una bailarina tradicional con tutú, que me pone el vello de punta las primeras notas y el lacrimal también trabaja un poco. Antes de mi pasión por ésto de la danza ya me llamaba mucho la atención esa pieza. No sé, igual es de alguna vida anterior. Y a continuación a las 8 empezaba en otro teatro el "Festival Bellysurdance" que se celebra todos los años con nuestra autóctona Alika Danza acompañada de muchas estrellas de la geografía española que nos ofrecieron Danza del vientre y similares. Fueron dos horas y media sensacionales. Y cuando todo parecía que con eso terminaba la cosa, pues no, el domingo el turno de las más pequeñas de la Escuela de Danza Rocío nos ofrecían un espectáculo callejero con bailes flamencos, la danza del fuego, bailes tradicionales de Jaén entre otros. Aquí sí que he portado mi cámara.
2 comentarios:
Yo también he visto una función de danza hoy que ya comentare.
Lamento lo del prxpróx cese laboral.
Lo del prxprox cese laboral ese es que pronto se incorporará la funcionaria que ha pedido la plaza que vive y trabaja en el mismo pueblo pero en Recaudación, allí estuve yo hace unos 20 años. Cosa rara porque normalmente es al revés, la gente quiere irse a Recaudación porque se gana más con lo del complemento de productividad. También tengo ya gana de venirme, lamentaré no ver ya a la gente de allí, pero estar unos mesecitos aquí en Jaén (dos o tres) cobrando el paro y que me vuelvan a llamar para Jaén.
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