La viñeta anterior viene a colación porque el lunes tuvimos que darnos un buen madrugón para ir al hospital de Alicante a que me extrajeran sangre para un análisis genético que me ordenó la neuróloga, y averiguar por fin cuál es mi enfermedad.
Avisé a las enfermeras que soy un caso difícil, que cuesta mucho encontrarme las venas. !¡Aquí nos gustan los retos!", exclamó el médico. ¡Claro, como él no era el que pinchaba!
Muy amables las señoras enfermeras, pero hubieron de pincharme hasta ¡seis veces! par poder encontrar una vena en condiciones y llenar un tubito de mi preciosa sangre. "Es usted una paciente muy paciente", me decían. ¡Y qué remedio!
1 comentario:
A mi en Alicante no consiguen encontrarme las venas.Despues de muchos intentos me tuvieron que sacar la sangre en el dedo pulgar y la verdad me dolio mucho.Consegui no llorar.
pero en el centro de salud de agost nunca he tenido problemas.Siempre me la encuentran a la primera.
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