Sinopsis:
En 2002, un equipo de reporteros del Boston Globe destapó los escándalos de pederastia cometidos durante décadas por curas de Massachussets. La publicación de estos hechos, que la archidiócesis de Boston intentó ocultar, sacudió a la Iglesia Católica como institución.
Unos actores fenomenales, sobre todo Mark Ruffalo, dan vida a unos periodistas que se enfrentan a todos los poderes establecidos (iglesia, policía, políticos y la misma prensa) para sacar a la luz uno de los escándalos, más bien crímenes, que nos avergüenzan a los católicos: los abusos a niños por parte de sacerdotes.
Seguimos paso a paso a los periodistas en su lucha por recabar testimonios de un tema tan peliagudo. Estremece oír a las víctimas, parte el corazón y revuelve las tripas pensar en esos desgraciados que destrozaron la inocencia de unos niños al abusar de su poder en nombre de Dios.
La película no ofrece sorpresas pues todos conocemos el caso, pero no aburre en absoluto. Sirve para admirar la existencia de la prensa, ese cuarto poder gracias al cual se destapan tantos desmanes que de otra manera quedarían ocultos.
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