Se cumplen 25 años del estreno de una de mis películas favoritas de todos los tiempos, La princesa prometida, la romántica historia de Wesley y Buttercup, llena de esgrima, duelos de ingenio y roedores de aspecto gigantesco. Bueno, y de besos. Aquella generación de niños aprendió que el amor no estaba reñido con la acción, y las niñas (y no tan niñas) nos quedamos con que existía el Amor Verdadero.
¿Y cómo olvidar a aquel aguerrido espadachín español? Seguro que más de una vez habréis repetido en tono solemne aquello de "Hola, me llamo Íñigo Montoya, tú mataste a mi padre, prepárate a morir".
Hace 25 años, un abuelo muy parecido a Peter Falk, el actor de Colombo, le contó a un niño muy parecido a Fred Savage (Aquellos maravillosos años) un cuento de esos de toda la vida, con aguerridos piratas, espadachines justicieros, malvados aristócratas y princesas en peligro. No sabemos si, gracias al relato, el chaval dejó de viciarse con su videoconsola y comenzó a leer un poco, para variar. Pero de lo que sí estamos seguros es de que el cine ganó una de sus películas de culto más memorables, llena de diálogos de esos que uno puede aprenderse de memoria: La princesa prometida, estrenada en EE UU el 25 de septiembre de 1987.
Podéis leer el resto del interesante artículo en: http://cinemania.es/actualidad/noticias/14467/12-cosas-que-probablemente-no-sabias-de-la-princesa-prometida
3 comentarios:
I'm Inigo de Montoya, you killed my father, prepare to die. Inolvidable, mi casette VHS estaba rallado de tanto que me gustaba la película.
Porque es tan buena la película? Porque toda ella es poesía pura.
Las frases han quedado en el recuerdo de todos.
Publicar un comentario