jueves, 10 de enero de 2013

The Client List



Anoche me puse a ver una serie que estrenaban en Divinity, The client list (anda que era difícil de traducir). Trata de una dulce joven interpretada por Jennifer Love Hewitt, (la actriz de Entre fantasmas), casada, con dos niños, a la que abandona el marido y se tiene que buscar la vida para mantener a su familia y pagar la hipoteca. Con su trabajo de fisioterapeuta no le llega, a no ser que atienda a clientes que demandan un “final feliz”.

El despropósito de serie es tal que no sé por dónde empezar: el lugar de trabajo rezuma tanta hermandad entre las chicas y la madame que ni en el convento de Sonrisas y lágrimas. Los clientes están de toma pan y moja, menudo despliegue de abdominales y pectorales de concurso; ¿entonces los feos no tienen derecho? La masajista es tan bellísima persona que, aparte de alegrarles la vista a los clientes con el mayor surtido de lencería fina (que es para decirle: olvídate de transparencias y encajes y ahorra para la hipoteca, monina), y el correspondiente final feliz que en ningún momento se ve, se dedica a interesarse por su vida personal y a darles consejos para que mejoren su matrimonio o encuentren novia, por poner dos ejemplos. O sea, una señora Helena Francis en picardías, con un envidiable sentido del equilibrio (entre los taconazos, las tetas y los kilos de pestañas postizas, no sé cómo no cae de bruces) y ejerciendo el oficio más antiguo del mundo. Os aseguro que flipaba pepinillos. Para rematar el cuadro, la pobrecita tiene un pedazo de cuñado la mar de detallista, que no solo cuida de sus sobrinos sino que también le corta el césped convenientemente descamisado, para que se nos vuelva a desencajar la mandíbula ante tal monumento.

Creo que con dos episodios tuve suficiente, pero lo mismo me da la vena masoca y el miércoles que viene repito.

4 comentarios:

Mari Pau dijo...

Yo vi que se trataba de esta tonta actriz y ya descarté la serie. Ahora que nos dices que va de prostitución beatífica, flipo en colores: la cruda realidad es que la gran mayoría son obligadas por mafiosos a realizar su crudo trabajo bajo pena de muerte y palizas. Y los clientes se creen con pleno derecho y justamente a realizar su "descarga" puesto que pagan, y no les interesa lo que hay detrás.

Johnny dijo...

Ya cumplió su primera temporada y se me hace que no llega a la segunda completa. Al menos aquí no ha tenido ningún alboroto entre el público.

maria esther dijo...

Yo como Mari Pau cuando vi quien era la protagonista de la serie tambien la descarte.Ya tengo suficiente con la serie de los fantasmas,que es lo mas tonto y ñoño que hay en televisión.

Juanfra dijo...

Jennifer Love Hewitt se está convirtiendo poco a poco en carne de series.