martes, 9 de enero de 2018

Estoy vivo



Sinopsis:
Andrés Vargas es un inspector de policía que muere persiguiendo al Carnicero de Medianoche, un asesino en serie que ya ha matado a cinco mujeres. Lo paranormal hace aparición cuando Vargas regresa cinco años después, usando para ello el cuerpo de otro agente policial, Manuel Márquez. En su labor de detener al Carnicero de Medianoche, Márquez está acompañado por una de las dos hijas de Vargas, Susana. Junto a ellos, el Enlace, un ser sobrenatural, que acompaña en el tránsito entre esta vida y el más allá.


Estas fiestas pasadas acabé de ver la primera temporada de esta serie. Para empezar, reconozco la parte original del planteamiento, esa mezcla de thriller de componentes de ciencia ficción y comedia costumbrista. En cuanto a lo primero, la verdad es que los efectos especiales dejaban que desear. La resolución del misterio y del asesino en serie no está mal.


No obstante, lo mejor es la composición de personajes por parte de actores solventes a los que se acaba por tomar cariño, empezando por Javier Gutiérrez, el envase pequeño de Roberto Álamo, siguiendo por el angelical pero de cuerpo pecaminoso Alejo Sauras, que se la pasa embutido en el mismo traje azul celeste o casi desnudo. Compite en cuerpazo con Alfonso Bassave. Muy sensible el tratamiento de un tema tan peliagudo como el Alzheimer. Mención especial a la enorme Cristina Plazas y al resto del elenco femenino. 

Me ha agradado pero dudo de que hasta el punto de esperar la segunda tanda.
   

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