Sinopsis:
El inspector Héctor Uría regresa al servicio tres años después del grave accidente de un reactor nuclear al norte de España como el único superviviente del primer grupo que acudió en socorro de la central. Ahora debe investigar el brutal asesinato de un hombre en la Zona de Exclusión.
Leo constantes alabanzas a esta serie. No es que esté en desacuerdo con ellas pero tampoco me ha enganchado como me figuraba. Como punto positivo, la creación de un ambiente casi postapocalíptico en tierra patria sin recurrir a los socorridos zombies que tanto asco me dan. Asimismo la combinación de amenazas medioambientales con la corrupción política, tan inherentes por desgracia a esta tierra. Todo ello respaldado por un gran reparto, tanto en principales como secundarios, desde Eduard Fernández a Juan Echanove o Álvaro Cervantes, pasando por Alexandra Jiménez, Marina Salas o Emma Suárez.
Con todos estos factores positivos, nada puede fallar, si no fuera porque no me enganchaba. Casi me obligué a ver la temporada entera pues no me quedaba con las ganas de un episodio más. Misterios de mi psique.
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