viernes, 2 de septiembre de 2011

Qué cosas.



El mundo es un pañuelo y Europa menos de la quinta parte de ese pañuelo y ya Bélgica y Navarra están a un tiro de piedra. Pero no pensó igual una alcaldesa de Bélgica cuando se fue al castillo navarro de Olite: se ve que se dijo "aquí no me ve nadie ni me conoce nadie, esto es la exótica España y nadie se enterará, así que además de ver el monumento, me echo un polvete en lo alto de esta torre". Craso error querida alcaldesa, no se sabe nunca quién está grabando al acecho o no tanto cuando se hacen cositas al aire libre. Como es la gente, a la mínima que ven movimiento sospechoso de sexo, allá que graban, aunque sea en lo alto de una torre de un alto castillo. Y de eso hace ya varios años, pero lo colgaron en Internet y alguien la ha reconocido ahora. Ella debe haber pensado tierra trágame.

4 comentarios:

Johnny dijo...

Cómo es posible que no haya respetado el lugar donde estaba, habiendo tantos hoteles de paso o alg{un claro en la carretera o de plano abstenerse de andar dando este tipo de espectáculos.

ana dijo...

Es posible, al menos el hecho lo demuestra.

márian dijo...

Me imagino que si hubiese sido una escena de una peli de Torrente, èsta se titularía "Un casquete en el castillete".

Conchi dijo...

Aunque puedo llegar a entender que haya gente a la que dé morbo el sexo en lugares públicos, pero hay que tener dos dedos de frente que eviten que toda la sangre baje a la entrepierna. Basta pensar que vivimos en la aldea global y nos vigila el Gran Hermano.
Iba a decir que ya no estoy para esos trotes, pero la alcaldesa tampoco es una jovenzuela que digamos.