jueves, 4 de noviembre de 2010

Come, reza, ama


Sinopsis:
Liz Gilbert (Julia Roberts) tenía todo lo que una mujer actual puede soñar, un marido, una casa, una exitosa carrera y como muchas otras personas, se encontraba perdida, confusa y buscando lo que realmente deseaba en su vida. Recién divorciada y ante la disyuntiva de qué camino coger, Gilbert sale de su acomodada vida y lo arriesga todo, embarcándose en un viaje alrededor del mundo que se convierte en una búsqueda para encontrarse a ella misma. Durante sus viajes, descubre el verdadero placer de la comida en Italia, el poder de la oración en la India y final e inesperadamente, la paz interior y el equilibrio del verdadero amor en Bali. Basada en las memorias del best seller de Elizabeth Gilbert, Come, reza, ama demuestra que hay más de un camino para dejarte llevar y ver el mundo.

Creo recordar que Johnny nos habló de la novela en que se basa la película. No la he leído pero el film no me ha convencido en absoluto.

Julia Roberts, a sus cuarenta y pico años, sigue empeñada en seguir siendo ‘la novia de América’, y para ello se ha dado todo homenaje a sí misma en este film. Y esto es así tanto por la excesiva duración de la cinta como por el hecho de que la actriz ande paseando su habitual colección de caprichosas dudas existenciales, pucheros y ojitos tristes a lo largo de medio mundo. En Italia se queja de la cantidad de kilos que ha engordado con la deliciosa comida del país. ¿Dónde se los mete? Porque no es que esté flaca, es que tiene una cara tan angulosa que si te fuera a dar un beso correrías el peligro de que te sacase un ojo con el hueso del pómulo. Luego se va a la India a encontrarse a sí misma y a meditar, igual que una amiga mía hace unos años. ¿Qué pasa, que hay que arrodillarse en suelo hindú para meditar? ¿No sirve el suelo patrio? Será que no, cuando hay tanta gente que se gasta el dinero en volar allí. O sea, que los pobres no podemos hallar la paz existencial. Por fin en Bali se liga a un Javier Bardem con cara de empanado al que nunca he visto sonreír tanto, como que no parece él, me pregunto qué estaría fumando.

En conclusión, una película que evitar por todos aquellos que odien el falso misticismo, el romanticismo de garrafón y el exotismo de postal. Eso, o es que me estoy haciendo mayor para aguantar tantas tonterías.

1 comentario:

Johnny dijo...

Aquí no se ha estrenado, hasta finales de mes creo. Por lo visto el libro era mejor y tal vez la peli no ha dado el ancho y es una típica versión que no igualó, mucho menos superó, al libro.