martes, 2 de noviembre de 2010

Daños y perjuicios (Damages)


Sinopsis:
La serie gira en torno a Patty Hewes (Glenn Close), una todopoderosa abogada litigadora, que hará lo que deba hacer para administrar justicia sobre los corruptos. Eso sí, hará lo que deba hacer según su sistema de valores, creado por Patty Hewes al servicio de Patty Hewes. La secunda Rose Byrne, en el papel de Ellen Parsons, la recién "salida del horno" brillante discípula de la ley que siempre se encontrará en posición de decidir si la ética está por encima de la justicia o si es la ambición la que lo está.
El eje de la serie lo conforma la relación entre ellas dos, tanto en su vida profesional y privada como su similitud a la hora de establecer una escala de valores, planteando siempre la cuestión de cuánto se parecen ambas bajo la superficie, y si Ellen terminará siendo como Patty.


Desde el verano hasta estos días he visto las tres temporadas de Daños y perjuicios (Damages), un absorbente rompecabezas con forma de thriller legal que esconde continuas sorpresas y engancha hasta el final del último capítulo. La serie sigue a Patty Hewes (Glenn Close), una elegante abogada que dirige con mano de hierro uno de los bufetes más poderosos de Nueva York. Se centra en lo que hacen los abogados estrella cuando bajan las escaleras de los tribunales, una intriga sobre la verdadera naturaleza del poder y del éxito en la que la mezquindad, las traiciones y la mentira dominan un mundo en el que todos tiene oscuros secretos que esconder.

Formalmente, la serie destaca por su habilidad para emplear flashbacks para incrementar el suspense. El guión teje con maestría dos tramas en dos tiempos diferentes que se cruzan, una anacronía que logra tener al espectador enganchado de principio a fin.


Sin embargo, el alma de la serie es la prodigiosa interpretación de Glenn Close, que encabeza el sobresaliente reparto de Daños y perjuicios. Ha creado una “mala” que ya forma parte de la historia de la televisión. Siempre con la cabeza encogida entre sus hombros, siempre en un plano más bajo que el de sus interlocutores, explotando hasta lo indecible esa mirada glacial. Elegante, pausada en sus movimientos. Con ese quitarse las gafas, esbozar una media sonrisa y clavar su mirada cual depredadora acechante logra tenerte en vilo de principio a fin, suspicaz hacia sus verdaderas intenciones. Impresionante su dicción, grite o susurre, se muestre dócil y maternal, o sarcástica y vengativa, siempre vocaliza y modula una voz cristalina. Un verdadero placer oírla en V.O.


2 comentarios:

Johnny dijo...

Algo se hizo Glen porque se ve mejor que cuando interpretó "Atracción fatal" con Michael Douglas.

carolina dijo...

Por lo que cuentas, tanto en el caso de una como de otra abogada no se trata de una lucha ética, al estilo de "Causa justa", sino que simplemente están en uno de los lados de la Ley y utilizan sus recursos para triunfar. El que sus ambiciones conduzcan a que se haga un poco de justicia en el sentido noble de la palabra (el que la hace, la paga) parece que se debe a una simple coincidencia.
De todas formas, tendría que ver la serie para hacerme una idea más cabal. A ver si tengo suerte y la ponen en alguna cadena.