miércoles, 7 de noviembre de 2007

Atrapa el fuego


Antes de que Patrick Chamusso (Derek Luke) se convirtiera en uno de los militantes más respetados del Congreso Nacional Africano, había sido un trabajador del sector de carbón y un hombre de naturaleza despreocupada. En su puesto de capataz en una refinería surafricana, Patrick soporta las humillaciones cotidianas del apartheid para poder llevar el sustento a su familia. Todo cambia cuando se le acusa de hacer volar las instalaciones de la refinería. Patrick es arrestado y su detención se prolonga durante varios días en los que sufre un interrogatorio inmisericorde. Hasta su mujer Precious es sometida a un trato brutal con el fin de conseguir su confesión. Para cuando el jefe policial Nic Vos (Tim Robbins) ordene la puesta en libertad de la pareja, Patrick se habrá radicalizado a resultas de su experiencia...

Es una película de remover conciencias al hablarnos del la lucha contra el apartheid. Resulta curioso ver a Tim Robbins, tan combativo en la defensa por los derechos civiles, interpretar a un policía racista de la minoría blanca sudafricana. Quizá sin su presencia no se habría podido realizar el film.

1 comentario:

carolina dijo...

Pues hay una película sudafricana, que yo aún no he visto y dudo que vea por cuestiones de distribución, que se llama "Forgiveness" (=Perdón) También aborda el tema del apartheid, aunque más bien desde la perspectiva del día despúes, es decir, tras las sesiones de la Comisión de la Verdad. Va de un policía que durante el apartheid torturó a varios activistas y disidentes y que no puede encontrar la paz, torturado por sus recuerdos. Por eso emprende un viaje hacia Paternoster, un pueblecito de pescadores donde vive la familia de una desus víctimas. Lo que quiere el poli es enfrentarse a su propio sentimiento de culpa y tratar de obtener el perdón por parte de aquellos a quienes hizo tanto daño. Pero el pasado no es tan fácil de redimir, y aunque al final la familia de la persona a la que torturó y mató supera sus propios conflictos, generados por la tragedia, y le perdona, otras personas no lo van a hacer.
Y es que puede que del dolor nazcan mártires, pero también surgen monstruos.