Sinopsis:
La trama gira en torno a la vida de Merrily Watkins, una párroco anglicana que practica el exorcismo y cuya vida es un caos. Su marido Sean, la engañó con otra antes de morir en un accidente de coche, y su hija Jane, una chica de dieciséis años, no es compatible con ella. Tras vivir muchos conflictos personales dudó de su fe, hasta que sus conocimientos de lo paranormal llamaron la atención de los detectives Annie Howe y Franny Bliss, de la policía local, y su vida cambió. Ellos solicitaron su ayuda en la investigación de un asesinato que podría estar relacionado con el culto satánico.
Empecé a ver con Pedro esta miniserie porque la sinopsis que leímos hablaba de una exorcista. Pedro abandonó a la mitad ya que poco se ajustaba a esa premisa. Existen componentes sobrenaturales y diabólicos, sí, pero casi como trasfondo de la estampa cotidiana de la vida de una pequeña ciudad inglesa y de las relaciones materno-filiales y vecinales.
No engancha mucho, esa es la verdad, y si la acabé de ver fue porque tiene pocos episodios y por el buen hacer de los actores británicos.
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