La otra tarde mis amigas Esther, Loli y una servidora, a raíz del dudoso atractivo del señor Aznar, nos devanábamos la sesera por encontrar un político que estuviese bueno. Intento en vano, huelga decirlo.
Como nos encanta meternos con la imagen de los políticos, le toca el turno a los supuestos implantes del señor Bono. La verdad, me habría imaginado una frivolité de estas en cualquier político menos en él, tan responsable y comedido siempre. La vida te da sorpresas, que decía la canción.
Y es que el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, se incorporó a sus obligaciones luciendo un nuevo look. El político parece que se ha sometido a un tratamiento capilar, a juzgar por cómo le ha crecido el pelo (en la foto, antes y después). El socialista manchego, de 57 años, ha rejuvenecido su imagen, ciertamente, ¿no os parece?
2 comentarios:
Yo lo encuentro muy favorecido con el cambio.
Ha pasado del lamido de vaca a poco cardado. Bien dices, sorpresas te da la vida
Publicar un comentario