Seis gramos de chocolate negro al día reducen el riesgo de sufrir un infarto

Ya sabía yo que algo tan bueno no podía ser malo.

Gracias a esta noticia, no tendré cargo de conciencia cada vez que sucumba al placer de comerme un cachito de chocolate negro, mi preferido. A quien me reproche las calorías que estoy ingiriendo replicaré que estoy velando por la salud de mi corazón, tan pocho en septiembre.

Y es que ¿quién puede resistirse a algo tan delicioso que se emplea incluso como sustitutivo del sexo cuando no queda más remedio? ¡Si les gusta hasta a los que no son golosos! Vale, es posible que conozcáis a alguien a quien no le pirre el chocolate, pero formará parte de una minoría que debería sentirse desgraciada por no poder apreciar semejante delicia: en tableta, bombones, tarta, helado, a la taza..., sea como sea está buenísimo. Sin abusar, eso sí.

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Un estudio elaborado por expertos italianos de la Universidad Católica en Campobasso, en colaboración con el National Cancer Institute de Milán ha llegado a la conclusión de que el consumo controlado de chocolate negro puede tener efectos beneficiosos en la prevención de enfermedades cardiovasculares.

Sin embargo, tampoco se puede abusar de este alimento y la cantidad recomendada para que su ingesta sea beneficiosa es de apenas una barrita. Según los científicos esta costumbre alimenticia supone una reducción media del 17%, es decir que disminuiría el riesgo de padecer problemas de corazón a un tercio de mujeres y a un cuarto de los hombres.

Según este informe, se encuestó a 20.000 habitantes de toda Italia sobre los que se controló el complejo mecanismo de la inflamación, que supone un gran riesgo para los problemas de corazón y provoca las principales enfermedades de éste órgano.

Según se explica en el artículo publicado en el diario 'Journal of Nutrition', este control de los pacientes determinó que los niveles de proteína reactiva C es uno de los marcadores más fiables para determinar este tipo de enfermedades y que, además, sus niveles se pueden detectar en una prueba de sangre habitual.

De este modo, se estudiaron los niveles de esta proteína en la sangre de los pacientes, llegando a la conclusión de que aquellos que regularmente comían chocolate negro registraron unos valores muy buenos: el colesterol normal, la tensión arterial y otros parámetros.