Calurosamente ...

He abierto un diccionario al azar y ésta es la palabra que me ha aparecido donde, sin fijarme previamente, he puesto mi dedo índice.

He introducido en el buscador Google esta palabra y de nuevo he vuelto a aterrizar en un diccionario, en este caso un diccionario de Español - Portugés.

Las siguientes entradas en las que aparecía esta palabra hacía referencia a la calurosa acogida por parte de los funcionarios del ayuntamiento de Melbourne a la Antorcha de los Derechos Humanosna y a la acalorada crítica al Partido Comunista Chino.

La siguiente entrada hacía referencia a la calurosa acogida dada en Ciudad de México al grupo musical BNK ( no los conozco). Otras entradas hacían referencia a la calurosa acogida al Rey, a los calurosos abrazos entre el Rey y Sarkozy.

Es curioso, la primera cosa en la que he pensado cuando he visto la palabra calurosamente ha sido en el tiempo atmosférico, en este pequeño verano adelantado que venimos disfrutando desde hace un par de días, he pensado en los helados y en los granizados de limón.

Nunca se me hubiera ocurrido pensar en acogidas, antorchas, derechos humanos, críticas, partidos comunistas, chinos, abrazos, reyes o presidentes de repúblicas.

Pero si hubiera pensado en lugares como Ciudad de México, adonde me encantaría volver o en Melbourne, adonde me encantaría ir.

Y otra cosa surrealista, si busco una imagen con el término "calurosamente", ésta es la primera que aparece. Es un castillo en la región francesa del Perigord, región que muy calurosamente os invito a visitar, por sus paisajes, por sus vinos, por sus viandas y sus pueblos medievales.