miércoles, 30 de abril de 2008

La soledad


Tenía curiosidad de ver esta peli para comprobar si era merecedora al Goya a la mejor película por encima de El orfanato y Siete mesas de billar francés (esta última no la he visto, así que me abstengo de opinar).

Me he topado con un dramón en el se dibuja una historia tan extrema y dramática que es para echar a correr. El guión ha decidido unir la competencia entre hermanas, la atracción del cosmopolitismo sobre la vida en el campo, y los efectos de un atentado sobre la vida de una persona... en una sola película. Adela está separada y decide irse a Madrid con su hijo. Antonia tiene tres hijas, Helena le pide dinero para comprarse un piso, a Nieves le detectan un cáncer e Inés alquila una habitación de su casa a una recién llegada Adela. Y de pronto la herida, el brusco giro que vuelve todo inevitable.


El espectador no tiene ningún problema para seguir la trama del drama humano, al fin y al cabo es tan humano y cotidiano que no nos descubre nada nuevo. Más bien parece un episodio de Vivir cada día o Vidas anónimas. Lo que sí que es un poco difícil de captar es tanto dramatismo y rabia unido en una sola película. Tampoco ayuda la puesta en escena: los planos fijos de una puerta entreabierta durante segundos y segundos interminables puede que sean metáfora de algo, pero de algo que se me escapa por completo. Qué queréis que os diga, llegó un momento en que me costaba mantener los ojos abiertos.

No abogo por el cine como perpetuo sinónimo de escapismo –también sé apreciar un melodrama costumbrista, por ejemplo-. Lo que no aguanto es que me tomen el pelo, y mucho menos a los críticos o a los cinéfilos que se las dan de enteradillos para loar todo aquello que no sea comercial.


Señores, ya sabemos que la democracia no es perfecta y que no siempre la elección de las masas es la correcta, pero no quieran crucificar películas como El orfanato por ser un taquillazo, para ensalzar pestiños como La soledad. Flaco favor le hacen al cine español con estos métodos.

3 comentarios:

Mari Pau dijo...

Esta viene a ser tipo Claude Chabrol. Qué interesante

Conchi dijo...

¡Qué manía le tienes al pobre Claude Chabrol, Mari Pau! Totalmente merecida, todo hay que decirlo.

Jesús dijo...

Yo no he visto el Orfanato, no me llamaba la atención y reconozco que le tengo un poco de manía a Belén Rueda. así que no puedo opinar.

La Soledad me gustó. Hay que reconocer que es una historia muy personal y un trabajo muy personal. Y al ser todo observado de una manera tan subjetiva es muy difícil que llegue a la gente.
la gente va al cine por muchos motivos, algunos van a pasar un buen rato, cosa que me parece estupenda, y para este grupo de personas está claro que La soledad es una película que será directamente clasificada como el pestiño del siglo.
Yo me considero un defensor de lo que se puede denominar "cine de autor", me gustan las historias subjetivas, intimistas. Historias que te pueden llegar más o menos, historias con las que te puedes sentir identificado.
Defiendo La Soledad frente a El Orfanato, pero, yo le habría dado el premio a Siete Mesas de Billar Francés. Esta peli sí que me pareció soberbia. Una buena historia con unas interpretaciones soberbias. Todos y todas están que se salen. Amparo Baró, Blanca Portillo y Emi-Maribel Verdú. (Emi es una amiga mía, tan parecida físicamente a Maribel Verdú, que son todas para una y una para todas)